Paridad
- Nicolas Ferreira
- 16 sept 2016
- 2 Min. de lectura

Es tema actual en las campañas (un tanto demagógicas) que tenemos por estos días en Chile, conversar acerca de la paridad, muy lejos de lo que la gente piensa, paridad no es igualdad.
La igualdad me molesta un poco, no es mi interés ser igual a alguien, y dudo que quisiera que todos fueron iguales a mi, en la variedad está el gusto, y no hay cosa más tediosa que no tener de donde elegir. Sin embargo ese no es el tema que me mueve a escribir hoy.
Malamente nuestra presidenta prometió hace 4 años paridad de genero en el gabinete, un año después, esa paridad se rompió, el problema no es poner la misma cantidad de hombres y mujeres en un puesto, si no poner a los mejores prospectos independientemente de su sexo.
Cuando pienso en consultar un doctor o un profesor, busco alguien responsable, con experiencia, reconozco sus capacidades e investigo sus pergaminos, no pienso si es hombre o mujer, eso no tiene absolutamente ninguna relevancia.
Como hombre, no imagino ninguna razón más decepcionante que ser elegido para un puesto, por tener una "Y" en vez de una "X" en mis cromosomas. Cuando se llega a este mundo, solo hay tres cosas que no podemos escoger, la primera es nacer, la segunda tus padres, y la tercera tu género (ojo esto no tiene absolutamente nada que ver con las preferencias sexuales), entonces, se me juzga o encasilla por algo que no puedo decidir, eso para mi es una aberración.
En el afán de hacer las cosas más "justas", las hemos convertido en más aceptables para la sociedad, lo hacemos a través de eufemismos y dulcecitos de menta, como "El día internacional de la mujer", ¿Que significa esto? ¿Que una vez al año las mujeres tienen un día para ellas? O sea los 364 días restantes son del hombre, eso es machismo a la inversa, y lo peor es que las mismas mujeres celebran y creen en este día como algo importante, todos los días son de las mujeres, todos los días son especiales para ellas como para nosotros.
Esta semana el café lo invito yo... avísame
Nico Ferreira
Escrito en diciembre-2009
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